Ediles le devuelven la pelota a Diputados. Proponemos un repaso sobre los argumentos y discursos de quienes decidieron abordar el tema, más allá de haber votado en contra del proyecto presentado por Mujeres Trans Autoconvocadas sobre una zona de convivencia. Lo que sí llamó la atención fue el rechazo del proyecto para trabajar en políticas inclusivas que se proponía paralelamente.

No sorprendió la respuesta de los concejales. Fueron pocos aquellos que se animaron a marcar posición y muchos los que optaron por seguir en silencio, evitando el costo político que conlleva apoyar o negarse al pedido del colectivo en cuestión. se fundamentaron, en su mayoria, en los reclamos de vecinos de la Pedrera, lugar donde funcionaría la zona. Se llegó a saber que solo se trató de un argumento ficticio. 

Alberto Salim (UCR) tomó la punta para fundamentar porqué rechazaría el proyecto. Al igual que varios de sus pares sostuvo que la prostitución viene aparejada de la trata de personas y otros delitos más, como la violencia. Luego de un extenso y reiterado punto de vista se opuso.

Frida Fonseca (PJ) jugó a dos puntas, literalmente. En una hábil estrategia marcó su negativa al proyecto de MTA, pero para apaciguar los ánimos que eso genera buscó promover un proyecto para generar inclusión dentro del municipio de las mujeres en situación de prostitución, propósito que fuera luego infundadamente rechazado por sus pares. Agradeció a los concejales por animarse a tratar el proyecto presentado por este colectivo, el cual resaltó que tranquilamente podrían haberlo continuado dilatando y prolongando. Como quien palmea el espalda de alguien, Fonseca valoró el accionar de MTA, quienes con madurez y respeto trataron el tema, haciendo uso de sus derechos de protesta afuera del recinto por varios miércoles.

Al mismo tiempo, continuando con su alocución describió en qué condiciones se encuentran las mujeres trans en la sociedad y como deben recurrir a ofrecer servicios sexuales por falta de oportunidades. En relación a la actividad de la prostitución sentenció que es una forma de violencia hacia las mujeres. Donde se criminaliza la oferta pero no al cliente, disparando críticas a la legislación vigente. Sin dejar de señalar que hoy muchas jóvenes ejercen la prostitución con el objetivo de recaudar para la compra de drogas.

La joven Lihue Figueroa (PV) hizo uso de la palabra, o mejor dicho de la lectura. Con un texto elaborado por su equipo técnico, realizó un recorrido por las condiciones actuales del sector de Mujeres Trans. Brindó testimonio de un trabajo de investigación de un periodista argentino, quien da cuenta con cifras de la cantidad de muertes de mujeres en ejercicio de la prostitución.

La edil, se despojó de su función oficialista  Urtubeisista y se despachó contra las fuerzas de seguridad, el GOPAR y los dichos del jefe de la policía sobre el colectivo trans. En busca de encontrar consenso apeló a los dichos del secretario de Derechos Humanos de Nación durante su visita en Salta, quien oportunamente se mostro a favor de una zona de convivencia en la ciudad.

Con la impronta que la representa, la concejal Socorro Villamayor, leyó el código de contravenciones en su Artículo 114 y sostuvo que “el Gobernador Urtubey hizo la vista gorda”, donde con una Cámara de Diputados con mayoría oficialista no buscó darle solución al sector de mujeres que optan por la prostitución como modo de sustento de vida. Dejó Urtubey librado al azar, reclama, donde no especificó qué lugar es el optimo, las condiciones de salud y seguridad de este sector es responsabilidad y jurisprudencia de su gobierno.

Por su parte, Ángela Di Bez, reiteró que los legisladores le tiran la pelota al municipio. Más alla de haber comprometido su voto previamente a MTA, la edil se comprometió a hacer uso de su capacidad y lo que haga falta para ir a la legislatura para buscar garantías necesarias para que la zona de convivencia se lleve adelante, pero como corresponde.

Por último, el novato concejal Ignacio Gonzales, buscó quedar bien con todas las partes, situación difícil. En sus argumentos sostuvo que no están dadas las condiciones para que se elija una zona y allí se ejerza la actividad. Planteó que se tenga una discusión libre de hipocresías, aspecto que el fue el primero en no ser honesto, puesto que su voto estaba comprometido con las mujeres de apoyarlas y resulto votando en contra por decisión de su bloque.

En resumidas palabras “están los legisladores jugando al pin pon” entre concejales y diputados. Ahora las marchas y protestas se instalaran los días martes fuera de la legislatura provincial. El colectivo trans asegura que van por la derogación del código por considerar inconstitucional criminalizar la actividad de prostitución.

Estaba escrito que votarían en contra de una zona de convivencia. Se supo que desde la riñonada de Gustavo Sáenz se buscaría no aceptar tener una zona roja legalmente. Recurriendo a la idea de tener actualmente nueve zonas rojas ilegales, que trabajar en una que sea creación de personajes políticos que obran bajo el patrón de la moralidad, las buenas costumbres y otra caterva de hipocresías, que solo sucede en sociedades conservadoras y eclesiásticas como la nuestra.

Fuente: PrimeroSalta