Este mes no inició con buenas noticias. A través de Primero Salta dábamos a conocer la noticia de que el Plan Hábitat dejaría de funcionar en Salta y recién hace unos días, distintas organizaciones que dependían de dicho organismo fueron desafectadas sin previo aviso, muchas de ellas incluso, contaban con contratos por un año más.

A través de un comunicado firmado por distintas organizaciones que trabajan con comunidades originarias en el norte de nuestra provincia, dieron a conocer la terrible situación por la que atraviesan y lo peor de todo, evidenciando por qué estas comunidades tienen razón en dejar de creer en el Estado que por ahora, no hace más que profundizar su histórico abandono.

En este sentido, Celeste Nogales, quien trabaja con la comunidad Ava-Guaranì de Misión San Francisco en Pichanal, informó a Primero Salta que la notificación les llegó de manera informal el pasado 1 de febrero.  "Me notificaron por un mensaje solamente, nosotros tuvimos que informar a las comunidades de Pichanal que ya no íbamos a trabajar con ellos. Estamos muy preocupados con toda esta situación”, sostuvo.

Además, Celeste expresó su preocupación ya que consideran que el arduo trabajo que venían realizando niños, niñas, jóvenes, adultos y ancianos de la comunidad se perderá por completo, puesto que aún les faltaba un año para concluir con el proyecto.

Por otro lado, la mujer explicó que teóricamente a las organizaciones las tiene que absorber provincia, pero hasta el momento sólo les comunicaron que los desafectaban del Plan Hábitat, sin hacer referencia al futuro de las mismas. “Estamos más que seguros que eso no va a ser así, ojalá nos equivoquemos, pero ni siquiera nos atienden, no nos reciben", señaló.

Finalmente cabe destacar que la comunidad Ava guaraní de Misión San Francisco, la misma que hoy se queda sin esta importante contención; es uno de los territorios de más alta vulnerabilidad, siendo una de las comunidades de mayor NBI (Necesidades Básicas Insatisfechas).